Supongamos que quieres comprarte un coche y que ya has mirado precios en España, tanto de coches nuevos como de coches seminuevos, ya que el principal objetivo es conseguir un buen precio y no te importa tanto si el coche tiene un par de años y algunos kilómetros, mientras esté en buen estado y el precio compense.
Pues bien, en esa situación es probable que algún amigo te comente que pruebes también a ojear en Alemania. ¿Por qué Alemania? Pues porque desde hace bastantes años ha conseguido labrarse la fama de que comprar un coche allí es más barato que en España. Pero, ¿es verdad? ¿nuevo o de segunda mano? Vamos a explicarte cómo comprar un coche en Alemania y cuándo interesa más.
Un coche nuevo no siempre será más barato
Lo primero que hay que contemplar es si queremos interesarnos por comprar un coche en Alemania nuevo o de segunda mano. A priori, entre otras cosas porque el IVA y otros impuestos sobre el automóvil en Alemania son algo más bajos, el precio de compra de un coche nuevo es también algo más bajo allí.
Sin embargo esta diferencia se reduce últimamente más de lo que podría parecer, ya que España se ha convertido en un mercado muy complicado y las marcas hacen ofertas comerciales muy fuertes, ya sea aplicando descuentos, ya sea incluyendo paquetes de equipamiento extra sin sobrecoste.
Pensemos en un ejemplo: un BMW Serie 3 berlina tiene un precio recomendado en Alemania a partir de 29.650 euros, mientras que en España tiene un precio recomendado, de tarifa, de 31.900 euros... claro que con descuentos y promociones resulta que al final parte de los 29.000 euros.
Otro punto importante a tener muy en cuenta es que los equipamientos incluidos de serie en Alemania y en España suelen ser muy diferentes, así que habrá que tener mucho cuidado de analizar detenidamente el equipamiento, ya sea de serie, ya sea incluido como extra sin sobrecoste, aquí y allí, para comparar en igualdad de condiciones, para llevarnos exactamente el mismo coche que queremos.
¿Cómo hacerlo? Pues con paciencia y tiempo recurriendo a los configuradores de los modelos que hay en las páginas web. Internet ha facilitado mucho este trabajo de comparar unos países con otros.
En un coche de segunda mano sí que se puede ahorrar
Os acabamos de explicar que en la compra de un coche nuevo no está claro que en cualquier caso, marca y modelo vaya a salir más barato en Alemania que en España, sobre todo porque si la diferencia es pequeña, los gastos de tener que traer el coche y otros trámites pueden echar a perder ese ahorro inicial.
En cambio donde sí se puede ahorrar dinero, y a veces bastante, es en la compra de coches de segunda mano seminuevos. Hay varias particularidades en Alemania que hacen de este país uno de los más interesantes al respecto. El primero es que es un mercado muy grande, con unos 80 millones de habitantes, y además en general el nivel de renta de los alemanes es más alto, por lo que se venden muchos coches, y además buenos.
Como además son bastante proteccionistas con lo suyo, se venden mucho las marcas alemanas, por lo que si estás interesado en un modelo de alguna marca germana, allí es donde más fácil te resultará encontrarlo. Los alemanes son bastante apasionados con los coches y suelen cambiarlos con más frecuencia, y cada menos años que en España.
Si sumamos a esto el hecho de que los alemanes son en general bastante respetuosos y cuidadosos con los coches, nos encontramos con un mercado de coches de segunda manos seminuevos con muy buen estado de conservación y muy buen precio, pues es en los dos, tres o cuatro primeros años cuando más rápido se deprecia el valor del coche.
De nuevo Internet te ayudará muchísimo a ojear las ofertas de coches seminuevos en Alemania, y a mirar versiones y precios de ese modelo que buscas. Como antes, te sugerimos que tengas paciencia y tiempo para buscar bien.
Las cuentas claras
Si ya estás casi convencido de que te interesa comprar un coche en Alemania, es importante que cojas una calculadora y hagas números para tener las cuentas claras.
Ten presente que hay dos opciones, o recurrir a un intermediario importador de coches de segunda mano, que obviamente cobrará por su trabajo y las gestiones que realice, y ganará lícitamente dinero por ello, o bien puedes hacerlo tú mismo directamente, con lo que te podrás ahorrar algo de dinero, aunque tendrás que hacerlo todo tú. Ten presente que el idioma es una dificultad, pues sin entender alemán se te va a complicar bastante hacer gestiones.
Tendrás que ir a Alemania para ver esos dos o tres coches entre los que dudas, entrar dentro, tocarlos, mirarlos con todo detalle y probarlos. Si estamos hablando de comprar un coche de segunda mano, hay que mirarlo de arriba a abajo y hay que conducirlo para comprobar personalmente que todo está correcto y funciona bien.
Por supuesto que todo es negociable: si el coche tiene una tara, pero se ha descontado en el precio, y te interesa de esa manera, no pasa nada.
El viaje a Alemania te costará lo que quieras gastarte. Si buscas con antelación vuelos baratos por Internet te ahorrás algo de dinero. Lo mismo se aplica a los hoteles, pues será difícil poder hacer todas las gestiones en el mismo día. Aquí calcula varios cientos de euros entre el viaje y el hotel, unos 100 el billete de ida y unos 100 el hotel, aunque de ti depende que sea poco o mucho.
También tienes que tener en cuenta otro gasto: el de traer el coche desde Alemania. Aquí de nuevo tienes dos opciones, o encargas un transporte, en camión o en tren, o bien te traes tú mismo el coche conduciéndolo de vuelta.
Si optas por la primera opción, mejor que sea con seguro para evitar un disgusto si le pasa algo al coche durante el viaje. Ten en cuenta que te puede costar entre 500 y 700 euros y que tardará varias semanas en llegarte. Si optas por la segunda opción, entonces ten en cuenta que el viaje puede ser de más de 2.000 km según la zona, así que hay que contar con el gasto en combustible y algún peaje (que pueden ser al final unos 250 a 300 euros aproximadamente).
Todo esto lo puedes relativizar. Si tenías ganas de hacer un viaje y conocer Alemania, te lo organizas bien, y además te gusta conducir, puedes considerar que aprovechas lo uno para lo otro.
Estos son los trámites para comprar coche en Alemania
Lo primero es verificar toda la documentación del vehículo, comprobar que estar libre de cargas y que no tiene multas pendientes, no te vayas a llevar una sorpresa. Hay que pasarse por la oficina de la autoridad de tráfico alemana, equivalente a la DGT aquí en España.
Una vez negociado el precio de compra, para pagarlo hay varias opciones, en metálico o con alguna herramienta bancaria. Es obvio que llevar una gran cantidad de dinero en metálico encima no es cómodo ni seguro, así que si puedes evitarlo, mejor. Los cheques bancarios suelen tardar en cobrarse, y no siempre convencen al vendedor. Una opción segura y con garantías para el vendedor es la transferencia bancaria swift, que envía una confirmación al vendedor el mismo día.
Si el coche se compra en una tienda o concesionario, se paga una factura como en España con IVA, el de Alemania (19 %). Ya no habrá que pagar IVA en España. Te pedirán DNI y pasaporte casi seguro. Si el coche se compra directamente a un particular no habrá factura ni te cobrará el IVA, pero sí tiene que haber un contrato de compraventa, y además cuando llegues a España tendrás que pagar el impuesto de transacciones entre particulares. Tendrás que presentar una traducción jurada del contrato (no, no vale una traducción de Google Translator).
Hay que pasar una ITV allí en Alemania (y puede costar unos 100 o 125 euros). Lo normal es que se desplace el inspector al concesionario donde te venden el coche. Con el certificado de la inspección superada y el permiso de circulación alemán, hay que pasarse por la autoridad de tráfico alemana para que ponga el permiso de circulación a tu nombre.
Pueden que en el concesionario te den también el certificado de conformidad del coche. Si lo tienes que pedir tú, te puede costar unos 100 euros. No es realmente imprescindible. Comprueba también que el coche lleva el distintivo ecológico en el parabrisas, una pegatina circular de color verde, amarillo o rojo, según sus emisiones: es necesario para circular por el centro de algunas ciudades. Si no lo tiene viene a costar unos 6 euros.
Una vez hecho todo esto tendrás que poner una placas de matrícula temporales al coche. Las placas más el seguro temporal, que viene a ser por un mes, vienen a costar unos 200 o 250 euros. Así podrás conducirlo de vuelta cruzando Alemania, Francia y España hasta tu casa.
Cuando ya estés en España tendrás que pasar la ITV en España. Sí, ITV por segunda vez. Esto te costará unos 50 euros, aunque depende mucho del tipo de coche y comunidad autónoma. Si no tenías el certificado de conformidad, habrá que sacar la ficha técnica reducida en la ITV, y entonces podrá subir todo a unos 100 euros (según el coche puede ser un poco más o un poco menos).
Hay todavía dos impuestos que pagar en España antes de poder matricularlo: el impuesto sobre determinados medios de transporte, que es un tanto por ciento sobre el valor del coche dada su antigüedad (entre el 7 y 12 %, varía dependiendo de las emisiones), según unas tablas de la Agencia Tributaria, y el impuesto municipal de circulación (impuesto sobre vehículos de tracción mecánica).
Y ya con todo esto puedes pasar por la oficina de la autoridad de tráfico española para matricular el coche, pagar otros 70 euros más por el permiso de circulación español y otros 30 euros aproximadamente por las placas de matrícula españolas.
Con todo esto, vuelve a sacar la calculadora para echar cuentas. El proceso completo es laborioso, pero en algunos coches, de tipo premium y alta gama, suele compensar comprar el coche en Alemania.
En Motorpasión | Quiero vender mi coche. ¿Qué debo hacer?
NOTA | Artículo originalmente publicado el 25 de febrero de 2015 en Motorpasión, por Ibáñez
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